Con las nuevas Smart TV y sus pantallas cada vez más grandes y con mejor definición, el cómo y el dónde colocar la televisión en casa son dos cuestiones que antes no planteaban dudas pero que ahora toman relevancia para acertar con la distancia y altura del televisor. Desde Buk Design León expertos en decoración e interiorismo en León, os queremos dar unos consejos para acertar en vuestra elección.
Generalmente elegiremos la tele en función del espacio disponible para su ubicación y las dimensiones del salón, ya que es conveniente saber las medidas máximas que puede tener nuestro televisor. La distancia óptima hasta el televisor es 2,5 veces la diagonal de la misma. Por tanto, hay que dividir entre 2,5 la distancia de la TV hasta el sofá para saber el tamaño del aparato más recomendable. Un ejemplo: para una distancia de 2,5 m, el aparato no debería superar las 40 pulgadas.
Por otro lado, además del espacio disponible y el tamaño del aparato, hay que valorar la resolución del mismo. Para resolución Full HD, la recomendación es situarse entre dos y cuatro veces el tamaño del televisor. Si tenemos resoluciones Ultra HD, la distancia se puede reducir a la mitad sin llegar a ver la imagen pixelada, pudiendo colocar una pantalla de gran tamaño en un espacio relativamente pequeño (una de 50 pulgadas a solo 2 m de distancia del sofá.
La altura a la que situar el televisor debería ser a la que coincidiera el centro de la pantalla con la altura de los ojos. Normalmente estará el centro de la pantalla a un metro del suelo, aunque todo dependerá de la postura que nos guste tener en el sofá y el tipo de soporte disponible.
Como los televisores cada vez son más finos y pesan menos, tenemos más variedad de soportes para colgar el televisor en la pared y el techo, fijo, móvil e incluso motorizado, con posibilidad de girar e inclinar la televisión para mejorar el ángulo de visionado.
Si estamos pensando en un televisor para el dormitorio, lo importante es que la ubicación del aparato no nos obligue a forzar el cuello, ya que en este caso la postura para verlo suele ser tumbados en la cama, siendo importante la elección del soporte.
En las cocinas, para colocar una televisión lo más eficaz es colgarla en la pared o en el techo con un soporte que permita adaptar su posición, debido a la habitual falta de espacio en la encimera, y a evitar el contacto con salpicaduras de agua, grasa, etc.
En cuanto a la iluminación, la televisión no debe ser nunca la única fuente de luz. Siempre es recomendable que, como mínimo, haya alguna lámpara con luz tenue y cálida en la estancia. Por otro lado, un exceso de luz tampoco es aconsejable, porque deteriora la percepción de la imagen y provoca reflejos y, por supuesto, nunca colocar la televisión enfrente de una ventana que provoque reflejos en la pantalla.